top of page
Buscar
  • Foto del escritorCiudadano Toriello

¡Plan Velásquez!

Todo ser consciente se enfrenta en algún momento de su vida a decisiones que le producen ‘angustia existencial’: son aquellas decisiones que tras ser tomadas, además de conllevar graves consecuencias, no dejan dar marcha atrás. El votante racional en Guatemala está llegando, sin remedio, al fin de sus cábalas electorales del 2,019. El 17 de junio, al despertar, recordará cómo votó el día anterior y previo a oír o ver las noticias, cavilará, como lo hizo Shakespeare en boca de Hamlet, que tras la decisión tomada, “el resto, es silencio”...


Todos sabemos que “el método” y la expectativa de la vieja política es que “la necesidad” de nuestro pueblo supuestamente les permite “comprar el voto” a quienes estén dispuestos “a poner suficiente pisto”. El método en cuestión se ha puesto en uso desde tiempos de la República Romana, que es de donde viene el término “clientelismo”, pero desde luego ha seguido demostrando su eficacia a lo largo de los tiempos y aún recientemente, como lo evidenció el régimen de Hugo Chávez, en Venezuela, hasta hace muy poco. De las viejas “maquinarias” construidas aquí con ese propósito, como cauda del despertar cívico del 2,015, salieron de la escena la de los “patriotistas”, de Otto y Roxana y la de Baldizón y quedó sin terminar de formarse la del “Sipi”; pero “por angas o por mangas”, quedó la de la UNE de Sandra, con sus malhabidos “conectes” y millones, ahora multiplicados con recursos de los narcos, lo que explica la avasalladora y casi solitaria presencia del “partido verde” en el paisaje electoral. Sandra, además, copiándole “el estilo” a su admirado Hugo Chávez, le echó a su fórmula el ingrediente adicional de exacerbar el difundido resentimiento social que está omnipresente en esta sociedad tan desigual en la que vivimos, ofreciendo “beneficios futuros” arrancados a los ricos para beneficio de los pobres - de los pobres amigos de Sandra, por supuesto, pues ella, como Ortega en Nicaragua, es clara exponente de la izquierda cínica. Cerebral y pragmática, con el auxilio de funcionarios y magistrados “de alquiler” y con el incauto aplauso de nuestros conservadores, sacó de la escena a su principal competidora por la siniestra, Thelma, la candidata de una izquierda soñadora e ingenua, la izquierda indisciplinada. Aunque sabe que algo de voto le chupa “la otra Thelma”, parece haber subestimado la “participación de mercado” de la izquierda fundamentalista, y por eso no le ha dado mayor importancia a esos neo-fascistas zurdos de CODECA, a esos que se mueven, abiertamente, en la “alegalidad”. Supongo que cree que llegado el momento, los usará. Fuera de lo dicho, en ese cuadrante del espectro ideológico ya sólo restan dos que tres miembros, como aquel Villacorta, de lo que para ella es la izquierda irrelevante...


¡Ahh... pero la bestia está herida! En primer lugar, porque nuestro pueblo podrá ser poco instruido, pero no es tonto y sabe que el voto es secreto. Gracias a la ubicua tecnología de las comunicaciones, ese pueblo está consciente de que en Venezuela se mueren de hambre y en Nicaragua de plomo en la cabeza; y ya vio, también, cómo desde el 2,015 han venido desnudando en público a los corruptos ¡y que ella está metida hasta el cuello en ese estiércol! Así que cuando uno pregunta en las barriadas se da cuenta de que buena parte de sus apadrinados ha venido cavilando en secreto una sorda protesta. Esto incluye desde aceptar las láminas y las bolsitas, pero votar por otro; hasta quedarse ‘enfermo’ todo el domingo 16, sin gastarse “el viático”. Por eso la doña, pese a los millones que gasta, no pasa del 20 al 25%, aún en esas encuestas tan amañadas que nos enrostran. Y por eso las mafias también tienen su apuesta por la derecha. De hecho, muy listos que se sienten, creen que “ahí está la verdadera jugada”, en pasar con uno de los suyos “a la segunda vuelta” y si es necesario, negociar con la otra mafia (“entre bomberos no se machucan las mangueras”). Eliminada judicialmente doña Zury (y ese es otro largo cuento) y conscientes del “poco pegue” del “kaibil oficial”, la gente detrás de Jimmy y de Degenhart apuestan con Giammattei, por “el salto atrás”, hacia la tutela de un Ortega Menaldo, con el aplauso de muchos de los nuevos inquilinos del Mariscal Zavala. Pero aún ellos se sienten inseguros, pues ya vieron que al pueblo consciente no le gusta lo que mira y por eso, no sólo hicieron proliferar (“divide y vencerás”) a una oferta política a la que no le permitieron comunicar sus propuestas, sino que ahora propician el voto nulo (que en la contienda Presidencial sí es un “voto mulo” aunque lo defienda algún ingenuo santulón) y la abstención (“todos son lo mismo”). Tienen el claro propósito de mejorar artificialmente su proporción en el recuento del voto y por eso inducen así a un electorado hostil, a trabajar a su favor... Tan inseguros se sienten, que algunas cabezas calientes hasta han contemplado un “Plan ‘C’”, que espero no se atrevan a poner en práctica: utilizar disturbios provocados por “expatrulleros desairados” para anular las elecciones y justificar con su repetición, otro año en manos de la oprobiosa entente que nos desgobierna...


Ni el afrancesado, ni Boberto, ni el resto de la derecha irrelevante, son respuesta inteligente a este cuadro. No hay que escoger aún al “mal menor”, no se trague el cuento: las estadísticas que dizque lo aconsejan, son insuficientes. A estas alturas, aún suman más los votantes indecisos que los de la propia Sandra y seguro habrá sorpresas. Luis Velásquez cuenta con el amplio aunque indetectado apoyo de una dirigencia departamental de muy respetados emprendedores, cuyo liderazgo se ha subestimado y que se manifestará a la hora de contar los votos. Dese usted cuenta de que Guatemala tiene hoy una clara oportunidad de cambiar de veras su rumbo errado y que dadas las circunstancias, sólo necesitamos un alcanzable voto de cada siete... Atrévase a soñar un verdadero futuro mejor para la Patria: con Luis Velásquez en la Presidencia y los diputados de UNIDOS en el Congreso, se pondrá en marcha el “Plan Velásquez”: el “Plan Pérez” en lo económico y el “método Falcone” en el combate al crimen y a la impunidad. Con ello, Guatemala experimentará un profundo viraje. No desaproveche la oportunidad de sumarse a este esfuerzo de hacer arrancar aquí un nuevo “milagro” económico y cívico. Estudie el proceso yendo a www.ciudadanotoriello.com para analizar estos conceptos en nuestra Plataforma Ideológica y Programática. Si con el poder de su voto hace usted esto posible, vendrán, incrédulos, académicos y analistas de otras partes del mundo, a ver “cómo lo logró Guatemala”... Converse con sus parientes, con sus amigos y sus conocidos. Ejerza su poder de persuasión. No lo olvide, ciudadano: cada Pueblo tiene el gobierno que merece...


"Publicado en la sección de Opinión de elPeriodico el 11 de junio 2019"

324 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page